8 febrero de 2005 Nuevas alegaciones de Ecologistas en Accion

Nuevas alegaciones al puerto deportivo de Castro Urdiales
Martes8 de febrero de 2005. Cantabria




Ecologistas en Acción de Cantabria ha presentado nuevamente alegaciones al expediente del “Anteproyecto del Frente Marítimo-Terrestre del Puerto de Castro Urdiales y Ordenación de la Dársena” que esta vez sí incluye un Estudio de Impacto Ambiental.

En Julio de 2004, Ecologistas en Acción Cantabria presentó alegaciones al citado anteproyecto porque, además de ser un proyecto con importantes impactos sobre el entorno de la bahía de Castro Urdiales, no incluía el Estudio de Impacto Ambiental exigido por la legislación vigente en materia de medio ambiente. En este sentido, en diciembre de 2004 la consejería ha vuelto a presentar a Información Pública el proyecto del “Frente Marítimo-Terrestre del Puerto de Castro Urdiales y Ordenación de la Dársena”, al que se ha incluido un Estudio de Impacto Ambiental, para cumplir las exigencias legales, pero en ningún modo se ha modificado el proyecto anterior.

Las recientes declaraciones del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla en las que expone que la construcción del puerto deportivo de Castro Urdiales ”es una decisión firme del Gobierno y que va a haber puerto” o que “lo que me molesta de estas cosas es que al final se van haciendo, pero con retraso”, resultan preocupantes. Parece ser que al señor Revilla le resulta molesto que en la tramitación de los proyectos que requieren Estudios de Impacto Ambiental, como es el del puerto de Castro Urdiales, los ciudadanos tengan derecho a tomar parte de forma efectiva mediante la presentación de alegaciones que deben ser contestadas justificadamente. Al afirmar que el puerto se va a hacer, independientemente de las consideraciones de la ciudadanía, deja ver un talante que dista mucho de ser democrático. Presentar alegaciones y solicitar prórrogas está dentro de nuestro derecho como ciudadanos a intervenir en proyectos que suponen un importante impacto sobre el medio y el presidente de una comunidad autónoma debería ser el primero en defender ese derecho y en tener en cuenta todas las propuestas.

Además, la realización de este proyecto no se plantea desde una necesidad de la población, que se ha posicionado claramente en contra. No entendemos por qué la Consejería de Obras Públicas pretende crear una falsa necesidad social cuando se tiene conciencia de sus contrapartidas ambientales y del rechazo que ha suscitado en la población castreña. En los nuevos terrenos ganados al mar se proyecta la instalación de nuevos locales comerciales que serán otorgados mediante una concesión de 30 años a una empresa privada por lo que se producirá una pérdida importante de un espacio público, siendo además injustificable su sustracción al disfrute tanto de los ciudadanos de Castro Urdiales como de sus visitantes.

Por otra parte, es un error vincular el proyecto del puerto al de la construcción de un aparcamiento subterráneo en el Parque de Amestoy. Ambos proyectos deberían ser considerados de manera independiente ya que responden a necesidades diferentes. Es más, el proyecto del nuevo puerto deportivo aumentará el tráfico de la zona de la bahía por lo que la construcción del aparcamiento subterráneo debería estar contemplada como una actuación encaminada a resolver un problema de tráfico actual y no el que la realización de este proyecto contribuirá a agravar.

Una de las justificaciones aportadas por el Gobierno de Cantabria respecto a la necesidad de la obra proyectada son las de “dar respuesta a los propietarios de las embarcaciones que ahora están fondeadas con boyas y muertos unitarios y que en el futuro podrían estar perfectamente atracadas“. Sin embargo, estas estimaciones son erróneas y abusivamente exageradas. Respecto a la primera de ellas, no se ha efectuado encuesta alguna a los interesados y muchos de ellos ya presentaron alegaciones contra la realización de dicho proyecto en las que afirmaban que dejarían de atracar por el aumento abusivo de tarifas, 10 veces más altas que las actuales.

Todo ello sin olvidar la pérdida en la calidad de las aguas y las características ambientales de la bahía de Castro Urdiales. Al aumentar el número de embarcaciones en la bahía se producirá un aumento de los vertidos procedentes de las actividades náuticas. Además, puesto que la construcción del nuevo dique cierra de una manera importante la bahía, se reducirá de manera drástica la renovación de sus aguas interiores produciendo una contaminación permanente y que se irá acumulando a lo largo de los años. Aunque las medidas correctoras propuestas se lleven a cabo y se cumpla la legislación vigente en esta materia, es un hecho indiscutible que la calidad del agua de la bahía se reducirá hasta tal punto de hacer el baño desaconsejable. Además, se producirá la eliminación de numerosas especies que aún permanecen y que constituyen un síntoma de calidad ambiental de la bahía.

http://www.ecologistasenaccion.org/spip.php?article1485